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¿POQUÉ ES BUENO COMER PRODUCTOS DE SEMILLAS GERMINADAS?

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Los productos saludables que ofrece PANADERÍA VIDA RÚSTICA tienen su origen en una tradición milenaria e iniciática que está sustentada en la salud que pueden brindar las semillas germinadas, pues, tanto las culturas indostánicas, como la babilónica, la persa y la egipcia, poseían esta sabiduría, mucho antes de que el mundo occidental, el de los griegos, los romanos y demás, la obtuvieran. Fueron los esenios, una comunidad de iniciados y propulsores de la cultura de salud, los que recibieron y acumularon esta sabiduría y la resguardaron, al mismo tiempo que la hacían extensiva al resto de la civilización en su tiempo, 500 años antes de Cristo. Para comprender lo anterior, han de tomarse en cuenta algunas consideraciones sustantivas sobre las grandes virtudes nutricionales y curativas de las semillas germinadas, entre las que pudiéramos mencionar las siguientes: 1.- La vida, genera vida, por ello, toda semilla, antes de comerse ha de ser germinada y la semilla que no germina, por estar muerta, no ha de comerse. 2.- Toda semilla al germinar, deja de ser ácida, para pasar a ser alcalina, lo cual es muy bueno para nuestra salud pues, sabido es que, los microorganismos patógenos: bacterias, hongos y virus, no viven o se les dificulta mucho hacerlo, en medios alcalinos. 3.- La semilla al germinar, deja de tener almidón pues, el que poseía, lo transforma en azúcares simples, fácilmente metabolizables; por eso, los panes de Panadería Rústica no contienen harina de ninguna clase y mucho menos refinada, sino que están elaborados con las semillas germinadas molidas. 4.- La semilla al germinar, construye una gran cantidad de fibras solubles como la pectina y amilopectina, que enriquecen la flora intestinal y contribuyen al mejor funcionamiento del aparato digestivo y la desintoxicación y purificación de los sistemas linfático y sanguíneo del organismo. 5.- La semilla en su germinación produce una gran cantidad de enzimas, que son altamente curativas, aún el ser humano no alcanza a descubrir la forma en que estas sustancias actúan generando salud integral y contribuyendo en la curación de todo tipo de enfermedades que aquejan a las personas. 6.- La semilla germinada produce una gran cantidad de antioxidantes, principalmente del campo del complejo B, que actúan liberando a nuestro organismo de la toxicidad del medio ambiente en que vivimos, de los metales pesados y ayudan mucho a la regeneración celular. 7.- Toda semilla, al germinar, produce vitaminas y minerales que no tenía en estado de latencia, tales como las vitaminas c, la k, la E, las del complejo B, y otras que le ayudan a enriquecer el bagaje nutrimental y curativo que le caracteriza. Se ha probado que una semilla germinada crece entre 300 y 1500 veces su poder nutrimental. 8.- La semilla al germinar, desdobla las cadenas proteínicas y las convierte en aminoácidos, por eso, una semilla germinada no contiene gluten, porque éste es una proteína que se desdobla con la germinación. También elimina las sustancias tóxicas con que se había protegido para su estado de latencia, por lo tanto es más digerible y limpia. Es muy importante comprender que la alimentación en base a semillas germinadas nos ofrece una nueva alternativa para la vida, para la salud y para la Paz. Es un nuevo camino para construir una nueva humanidad.

Profesor Joaquín Enríquez Flores. Nuestros productos en: https://pajile.wixsite.com/vidaruswebsite

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